Es lógico pensar que este modo de entender la relación entre religiones y confesiones cristianas (exclusión, conflicto y conversión) debía acabar entrando en crisis, aunque fuera sólo por efecto del sentido común y de la racionalidad de la cultura moderna. Era evidente, incluso por sentido común, que, si Dios realmente existía, debía estar presente, en alguna manera en todas las religiones que debían considerarse verdaderos caminos de relación con Dios y de salvación. La existencia common de las tradiciones religiosas –en toda su variedad de teologías, cultos y diversa inserción social– suele aducirse como una prueba de que efectivamente existe un Dios que, en alguna manera, está en el fundamento de todas ellas. Sin embargo, hay un enfoque distinto que llega, al contrario, a la conclusión de que la existencia de las religiones es una prueba de la poca probabilidad de que un único Dios existente hubiera propiciado una variedad tan contradictoria de religiones. En el apéndice deLa idea de una sociedad cristiana del premio Nobel T. S. Eliot ya se señalaba una llamativa paradoja, atestiguada por la historia.

Bernardo estudió Filología Románica en la Universidad de Salamanca. Después cursó el máster de Español como Segunda Lengua en la Universidad Complutense de Madrid. Tras un año en Madrid haciendo diferentes trabajos, voló hasta Singapur para dar clases de español durante un año. Volvió a Madrid y dio clases en una academia de español para extranjeros y ahora es traductor y community manager para una empresa de bicicletas de prestigio internacional. Aunque estudió filología por pura vocación, sus intereses siempre han abarcado todas las humanidades, sobre todo la historia, el arte, la geografía o la filosofía. En Tailandia, el rey Ramkhamhaeng de Sukhothai (antecesor del país actual) adoptó la religión budista en el siglo XIII.

Según hemos ido viendo en los dos artículos, el cristianismo fue creciendo paulatinamente al mismo tiempo que otros cultos adquirían o perdían popularidad. [newline]Esto ha solido recaer en la conciencia colectiva como que un movimiento ideológico homogéneo escalaba en las clases sociales romanas hasta llegar a tomar el bastón de mando. La distinción en Roma de política y religión no pueden desligarse nunca al completo, pero este vínculo tan estrecho no era propio de las instituciones imperiales hasta este momento. Pero eso no quiere decir, que las personas, los seglares católicos, que tenemos muy enraizada nuestra fe. No intentemos dar ejemplo a nuestros semejantes, con nuestras palabras y obras, con nuestra forma peculiar de ver la vida. Intentando en el día a día, ser verdaderos apóstoles y discípulos del Maestro.

Guarda mi nombre, correo electrónico y internet en este navegador para la próxima vez que comente. La primera parte, también llamada el “Evangelio de los signos“, habla de la misión de Jesús desde su Bautismo hasta su conclusión. Su nombre deriva de siete eventos que representan los nudos cruciales de la vida y la obra de Jesús, en ocasiones de los cuales Él ha realizado milagros y revelaciones. Los Cristianos practican su culto en la Iglesia, que de hecho es un lugar físico, pero sobre todo es una comunidad de personas reunidas en la fe en Cristo.

La tercera prueba, colocada por Eusebio, son los acrósticos, la palabra SIMÓN, que significa patraña, cuento, bulo. La colocó en todos los capítulos del Evangelio de Marcos, del de Juan, en la Carta de Santiago, en las tres Cartas de Juan, en su obra más importante, la “Historia eclesiástica’’, y en varios falsos textos cristianos primitivos, que él escribió. Es la prueba más evidente y fácil de ver, porque colocaba muchas letras de las que forman la palabra SIMÓN. Aporto las pruebas documentales de que Jesucristo es un personaje literario, inexistente, creado por Lactancio para fundar una religión nueva, que adorara a un solo dios. Mientras el Cristianismo reza a Dios y afirma la doctrina de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo), el Islam tiene como dios a Alá.

Las expresiones que hoy trasmiten, mañana pueden quedarse obsoletas. Adaptar el lenguaje no es traicionar el mensaje sino utilizar los medios apropiados y propicios para que el mensaje llegue a la gente de hoy. Aunque Cristo y su mensaje sean inmortales, los sistemas y las maneras de hablar de ellos pasan de moda, perecen, son efímeras. El cristianismo es el seguimiento de una persona que enseñó cosas que sus seguidores han de aprender. Cuanto más efímero es lo que una generación hace, más se orienta por la moda que satisface de manera diferente en cada momento y en cada lugar las necesidades perentorias del hombre. El lenguaje es creatividad, artesanía pura, antropología y ciencia.

La radiación se extiende por Escandinavia para más tarde llegar a Europa pero la gente no lo ve. Con esto, evidentemente, no quiero decir que el cristianismo nos mate, de ninguna manera. San Andrés, uno de los 12 apóstoles, estuvo evangelizando en Rumanía, según cuentala tradición ortodoxa. Desde entonces, el cristianismo se asentó en los montes Cárpatos, o, al menos en el territorio rumano. El cristianismo como tal, comenzó con la predicación y enseñanza de los apóstoles de Jesucristo, después del día de Pentecostés, donde se cree, recibieron el Espíritu Santo de Dios. Quizás esta es la razón por la cual la Biblia nos exhorta a ejercer sabiduría y humildad cuando se trata de aspectos secundarios donde existen diferencias genuinas (Romanos 14-15).

Estas virtudes, en contraposición a la riqueza y el poder terrenal, están indicadas como camino de fe y elevación espiritual, así como un llamado a la gracia y el Espíritu Santo como fuente de salvación y vida eterna. También hay otras diferencias en lo que los Judíos creen en comparación con los Cristianos. Estos últimos veneran a los santos y a la Virgen María, hasta el punto de dedicarles santuarios y celebraciones, mientras que los Judíos solamente veneran a Dios, Yahvé, cuyo nombre no se puede pronunciar. Los Sacramentos también son diferentes entre las dos profesiones de fe. Los Cristianos católicos celebran la Eucaristía y predican la importancia de la Confesión, que faltan por completo en la religión judía, mientras comparten el Sacramento del Bautismo. Central para entender la diferencia entre judíos y cristianos es la consideración de la figura de Cristo.

Unas cuantas iglesias objetan el reconocimiento de festividades especiales, pero no obstante afirman los eventos que se celebran en las festividades. En esta materia, la encarnación y resurrección de Cristo se celebra en los servicios de cada iglesia. Como en la mayoría de las religiones, existe dentro del cristianismo un grupo de libros agrupados en lo que se conoce como Biblia, y que contiene texto sagrado para su consideración y obediencia. Las distintas denominaciones cristianas varían en cuanto al contenido e interpretación de dichas escrituras. El Lhabab Duchen tiene aún más importancia que el año nuevo; es la fiesta que recuerda cómo Buda viaja mágicamente al paraíso y predica su enseñanza a los dioses que lo siguen y a su madre, que estaba en un proceso de muerte y dolor que acaba en renacimiento, en un reino celestial. Cuando Buda regresa después de tres meses, sus seguidores hacen una fiesta conocida como "el retorno".

Sus viajes lo llevaron a conocer hombres y mujeres lejanos, a los cuales manifiesta su grandeza no solo con parábolas, sino con milagros y curaciones prodigiosas. Los discípulos a menudo luchan por comprender su misión y el significado profundo de sus discursos. Jesús abre sus ojos a la fe, para que lo reconozcan como el Mesías, y les enseña con sus predicciones y el ejemplo de su propia existencia.

Views: 2

Comment

You need to be a member of On Feet Nation to add comments!

Join On Feet Nation

© 2024   Created by PH the vintage.   Powered by

Badges  |  Report an Issue  |  Terms of Service